23 de septiembre de 2012

Efectos de la contaminación atmosférica

Efectos de la contaminación atmosférica

Algunos emisores procedentes de ciertas actividades humanas pueden causar graves daños a la atmósfera, como la lluvia ácida, la destrucción de la capa de ozono y el efecto invernadero.


Impactos sobre la atmósfera


Los impactos ambientales que más afectan a la atmósfera relacionada con las diversas actividades humanas se recogen en el esquema siguiente:














El efecto invernadero

Quizás el más grave impacto causado por los seres humanos sea el calentamiento global originado por el efecto invernadero.
El efecto invernadero es un proceso natural generado por los gases de invernadero (CO2, CH4, N2O 
y clorofluorocarbonos), que absorben las radiaciones infrarrojas emitidas desde la superficie del planeta e impiden que se escapen hacia el espacio exterior. Esto provoca que la temperatura del aire superficial sea más cálida. Por eso, la temperatura media de la Tierra se ha mantenido alrededor de unos 15°C y es adecuada para el mantenimiento de la vida. En los últimos tiempos, la humanidad está vertiendo grandes cantidades de gases de efecto invernadero a la atmósfera, debido, fundamentalmente, a la quema de los combustibles fósiles, la deforestación, los incendios forestales y la ganadería.
El resultado de un incremento de efecto invernadero natural del planeta puede ser el aumento de la temperatura global o calentamiento global de la Tierra, que podría acarrear graves consecuencias: los 
hielos polares se derretirían, subiría el nivel mar, amplias zonas sufrirían graves cambios climáticos, las cosechas se reducirían y determinadas enfermedades, como la malaria, se extenderían. 



 Lluvia ácida
Se considera lluvia ácida a cualquier precipitación con un PH inferior a 5,65. 
Desde un principio se sospecho que existía relación entre la contaminación atmosférica y la acides de
 las lluvias. La composición química dela agua de lluvia depende de la composición de la alta atmósfera, 
donde se forma las gotas por condensación, y también de las sustancias presentes en el recorrido de las gotas desde la alta atmósfera hasta el suelo. La precipitación tienen, pues, capacidad de incorporar los contaminantes existentes en el aire. 


Proceso de la formación de lluvia ácida.


Las combustiones de carbón y derivados del petróleo generan cantidades apreciables de óxidos de azufre y de nitrógeno. En el caso del dióxido de azufre, las emisiones 

naturales son muy escasas, 

aunque los volcanes producen volúmenes importantes de ácido sulfhídrico, que termina oxidado a dióxido de azufre. En los óxidos de nitrógeno, las emisiones naturales a la atmósfera

son unas 20 veces mayores que las producidas por la acción del hombre. Los óxidos de azufre y nitrógeno se pueden convertir en ácidos sulfúricos y nítricos, que son los compuestos químicos responsables de las lluvias acidas.


Efectos en los ecosistemas.


En los bosques se han observado daños directos originados sobre todo por esos depósitos de partículas que se pueden convertir en acidas posteriormente, pero también por las nieblas u lluvias con PH muy bajo. Además, parte de lo efectos de lo que se ha llamado el declive de los bosques, se debe muy posiblemente a la influencia de las lluvias ácidas sobre los suelos, que quedan empobrecidos de elementos minerales básicos, como potasios, magnesio y calcio.


El la lagos y ríos se han advertidos también descensos del PH debido a las lluvias ácidas. En muchas ocasiones se ha observado una disminución del número de especies tanto vegetales como animales, ya que mucha de ellas son sensibles a la acidificación

No hay comentarios:

Publicar un comentario