3 de septiembre de 2013

Pablo Neruda



Especial 
Pablo Neruda



Diseminada en miles de versos ha quedado para la posteridad la biografía, íntima y pública, secreta y militante, del gran poeta chileno Pablo Neruda. Nos legó además la crónica de sus días agitados y viajeros en unas líricas memorias tituladas Confieso que he vivido, y sobre su figura han escrito numerosos amigos del escritor, su apasionada viuda Matilde Urrutia y centenares de críticos e historiadores.

La abrumadora personalidad de este hombre de credo comunista, resuelta y tozuda hasta el sacrificio por todo aquello en lo que creía, estalla en su obra con un aliento vital que apenas deja entrever las muchas tribulaciones y las muchas horas sombrías que hubo de atravesar. Para algunos que lo conocieron, especialmente para aquéllos que compartieron con él la lucha contra la miseria y la opresión de los pueblos, Pablo Neruda gozó del carisma excepcional de aquellos elegidos a quienes encaja como un guante la palabra ejemplaridad; pero para la mayoría de los lectores que no gozaron de la fortuna de su abrazo, el poeta será siempre aquel personaje tímido, invisible y agazapado que se ocultaba tras los barrotes horizontales y tenues de sus lindas canciones de amor.

Nacido en 1904 en Parral con el nombre de Ricardo Eliecer Neftalí Reyes Basoalto, Neruda se sintió durante toda su vida profundamente enraizado en su tierra chilena pese a haber llevado una existencia de viajero incansable. Su madre, Rosa Basoalto, murió de tuberculosis poco después de dar a luz, y su padre, conductor de un tren que cargaba piedra, José del Carmen Reyes Morales, se casó dos años después con Trinidad Cambia Marverde, de quien Neruda escribiría: "Era una mujer dulce y diligente, tenía sentido del humor campesino y una bondad activa e infatigable". Para el pequeño Neftalí fue su nueva madre como el hada buena; tuteló al muchacho con una solicitud incluso mayor que su auténtico padre, con quien, en su adolescencia, no tardaría en mantener graves disputas.


Residiendo en Temuco, ingresó en el Liceo de la ciudad en 1910, y cuando aún no había salido de esta institución, el 18 de julio de 1917, pudo leer emocionadamente en un periódico local, La Mañana, el primero de sus artículos publicados, que tituló "Entusiasmo y perseverancia". Para entonces había tenido la suerte de conocer a una imponente señora, "alta, con vestidos muy largos", que no era otra sino la célebre poetisa Gabriela Mistral, quien le había regalado algunos libros de Tolstoi, Dostoievski y Chéjov, decisivos en su primera formación literaria.

No obstante, su padre se oponía abiertamente a que siguiera esta vocación, de modo que cuando el 28 de noviembre de 1920 obtuvo el premio de la Fiesta de Primavera de Temuco, el joven poeta ya firmaba sus poemas con seudónimo, un ardid para desorientar a su progenitor. El nombre elegido, Neruda, lo había encontrado por azar en una revista y era de origen checo; no sabía que se lo estaba usurpando a un colega, un lejano escritor que compuso hermosas baladas y que posee un monumento erigido en el barrio de Mala Strana de Praga.

Cuando concluye sus estudios en el Liceo pasa a Santiago para seguir la carrera de profesor de francés en el Instituto Pedagógico, pero continúa preparando libros de versos. Al poco tiempo se vincula a la revista Juventud de la Federación de Estudiantes, donde toma contacto con el movimiento anarquista y, en particular, con uno de los líderes del grupo, formidable y valeroso, llamado Juan Gandulfo. En 1922, habiendo trabado una buena amistad, que se revelaría fecunda y duradera, con el director de la revista Claridad, se incorpora a su redacción, y así comienza a escribir como un poseso hasta cinco poemas diarios. Al año siguiente edita a sus expensas su primer libro de poemas, Crepusculario.

Para poder pagarse esta publicación, Pablo Neruda, por entonces un joven ávido de lecturas y de vida, extravagante y delgado, vestido a lo poeta bohemio del siglo XIX con un traje negro, debe vender sus muebles, empeñar el reloj que le ha regalado su padre y recibir la ayuda in extremis de un crítico generoso. Este último, un tal Allone, se prestó a saldar la deuda cuando el editor se negó a entregar un solo ejemplar antes de que estuviera satisfecha completamente la factura.

Neruda y Nicolás Guillén en el Aula Magna
de la Universidad de La Habana (1960)

Crepusculario fue en realidad una miscelánea de otros proyectos, una reordenación precipitada de poemas que inmediatamente dejaron insatisfecho al autor. A partir de entonces Neruda se entregó, con más ahínco si cabe, a la confección de otro libro, éste sí, orgánico y mucho más personal, que terminaría publicándose en 1924 con el títuloVeinte poemas de amor y una canción desesperada.







Diplomático por Asia

A partir de esta época la politización de la poesía de Neruda será progresivamente mayor y, paralelamente, su vida se verá enfrentada a adversas circunstancias económicas. De momento, al abandonar sus estudios, su padre le retira toda ayuda material, por lo que abraza la esperanza de conseguir algún cargo diplomático. Sin embargo, todo lo que obtiene en 1927 es un oscuro y remoto destino consular en Rangún, Birmania.

Allí, en aquellas tierras fantásticas, "entre hombres que adoran la cobra y la vaca", conoció Pablo Neruda a la tan bella como peligrosa Josie Bliss, una nativa que sin embargo vestía a la manera inglesa. Tras visitar en su compañía los más exóticos rincones de aquellas tierras, se trasladó a vivir a casa de ella, pero pronto la muchacha trocó su dulzura en celos, y la vida de la pareja se hizo intolerable. "Sentía ternura hacia sus pies desnudos", escribió el escritor, pero también contó cómo Josie le escondía las cartas y cómo, en una ocasión, se despertó sobresaltado y la encontró vestida de blanco, al otro lado del mosquitero, tenebrosa, blandiendo un cuchillo mortífero y sin determinarse a asestar el golpe fatal: "Cuando te mueras se acabarán mis temores", balbuceó con amargura la mujer enferma.

Asustado, Pablo Neruda no tardó en huir de aquella situación que cada vez se volvía más amenazante, y cuando recibió un telegrama en el que se le comunicaba su traslado a Ceilán, preparó el viaje en el más absoluto secreto y se marchó sin despedirse, abandonando en el desolado hogar de Josie sus ropas y sus libros.

Ejerció durante un año de cónsul en Colombo (Ceilán, actual Sri Lanka) y en 1929 fue trasladado a Singapur. Su inquietud por las culturas indostaníes y la política lo llevó a asistir al Congreso Panhindú, celebrado en Calcuta en 1929. En 1930, Pablo Neruda se casó con María Antonieta Hagenaar, una joven holandesa con la que regresó a Chile dos años después y que le dio una hija, Malva Marina, el 4 de octubre de 1934. Ese mismo año, y tras haber conocido a Federico García Lorca en Buenos Aires, se trasladó a España para hacerse cargo del consulado chileno en Barcelona. En España desarrolló una intensa actividad cultural y conoció a poetas de la generación del 27 como Miguel Hernández, Luis Cernuda, Vicente Aleixandre o Manuel Altolaguirre.


Neruda en España

Su integración en aquel Madrid pletórico de pasiones políticas se acrecentó al año siguiente, pues en febrero de 1935 se hizo cargo del consulado de Chile en la capital española. En Madrid apareció aquel año la revista literaria Caballo Verde para la Poesía, dirigida por el poeta. También allí dio a la imprenta una de sus obras más célebres, Residencia en la Tierra, y conoció a su segunda esposa, Delia del Carril.

La trayectoria española de Neruda tomó tintes dramáticos cuando el 18 de julio de 1936 dio comienzo la terrible guerra civil que enfrentó a "las dos Españas". Uno de los primeros hechos sangrientos de aquella lucha fue el fusilamiento de Federico García Lorca. Abandonó la península Ibérica en pleno conflicto bélico y se dirigió a París, desde donde participó activamente en actos de solidaridad con la República y el pueblo español. Tras su regreso a Chile, en 1937, prosiguió su actividad combativa con la publicación de España en el corazón.

En 1938, Ediciones Ercilla dio a la luz una recopilación de sus obras. Aquel año falleció su padre en Temuco y poco después, su madrastra. En octubre triunfó en las elecciones generales chilenas el Frente Popular. Mientras, en Cataluña, se editaba España en el corazón.

La Guerra Civil española concluyó en 1939 con la derrota de los republicanos. Neruda solicitó, y obtuvo, el nombramiento de cónsul para la inmigración española. Con la idea de ayudar en lo posible a los derrotados, viajó a París y desde allí organizó una expedición de españoles a bordo del vapor Winnipeg que llegó a Valparaíso a finales de año. El poeta regresó de nuevo a Chile en 1940, cuando ya había comenzado la Segunda Guerra Mundial, pero permaneció poco tiempo en su país, pues en agosto se incorporó a un nuevo destino diplomático, el consulado general de Chile en México. Desde allí viajó a Cuba. En 1942 publicó América, no invoco tu nombre en vano, que después fue incorporado al Canto general; ese año sufrió la pérdida de su hija, Malva Marina, que falleció en Europa.


Política, exilio y reconocimiento

A partir de 1946, su actividad política se desarrollaría en su propia patria, donde fue elegido senador de la República por las provincias de Tarapacá y Antofagasta. Ese mismo año obtuvo también en Chile el Premio Nacional de Literatura, pero no tardarían en complicársele las cosas cuando hizo pública su enérgica protesta por la persecución desencadenada contra los sindicatos por el presidente González Videla. La lectura ante el Senado de su alegato Yo acuso motivó que se ordenara su detención y sólo gracias al refugio que le ofrecieron sus allegados logró Neruda evitarla y salir del país el 24 de febrero de 1949.

Durante el tiempo en que estuvo oculto preparó otra de sus obras mayores, Canto general, que, aparte de distribuirse clandestinamente en Chile, se editará en México en 1950 con ilustraciones de los grandes muralistas Siqueiros y Diego Rivera, poco antes de que se le conceda, junto a Picasso y al poeta turco Nazim Hikmet, el Premio Internacional de la Paz. Comienza entonces un doloroso destierro, cuya tristeza apenas puede ser enjugada por los numerosos homenajes, calurosas recepciones e importantes galardones con que se reconocen sus méritos como poeta y como hombre íntegro. En 1951 inició un viaje por Italia, país en el que fijó su residencia al año siguiente. En Capri escribió Las uvas y el viento. Después de un viaje por Europa, al ser revocada su orden de detención en Chile, pudo regresar a su casa en agosto del 1952. Su retorno fue motivo de múltiples homenajes públicos. En este periodo difícil del destierro había venido en su auxilio una mujer, la que sería su compañera hasta su muerte: Matilde Urrutia.




En Italia con Matilde Urrutia


Los años siguientes fueron de permanencia en Chile. Organizó en Santiago el Congreso Continental de Cultura, al que acudieron notables personalidades como Diego Rivera, Jorge Amado y Nicolás Guillén. Dictó conferencias en la Universidad de Chile, institución a la que hizo donación de su biblioteca personal. Esta relación con la Universidad dio origen a la creación de la Fundación Neruda para el Desarrollo de la Poesía. En su vida privada fueron tiempos agitados, pues se separó en 1956 de Delia del Carril para unirse sentimentalmente con Matilde Urrutia, que fue a vivir a su nueva casa, La Chascona. Sus obras seguían apareciendo a buen ritmo, con publicaciones intermitentes, en Buenos Aires por Losada y en Santiago por Nascimento: Viajes, Nuevas odas elementales y Oda a la tipografía, entre otras. En 1957 Losada publicó susObras completas en papel biblia y, en los años sucesivos,Cien sonetos de amor, Tercer libro de las odas yNavegaciones y regresos. En 1958 aparece editada otra de sus obras más notables, una de las preferidas del poeta,Estravagario. "Por su irreverencia (escribió Neruda) es mi libro más íntimo".

El incansable viajero sintió de nuevo la llamada de Europa y en 1965 se trasladó a ese continente, donde recibió nuevos honores. La Universidad de Oxford le nombró doctor honoris causa en Filosofía y Letras. En Hungría se entrevistó con Miguel Ángel Asturias. En 1966 viajó a Estados Unidos invitado a la reunión del Pen Club. Realizó ese año una interesante incursión en el arte dramático con su obra Fulgor y muerte de Joaquín Murieta, que fue estrenada en Santiago en 1967 por el Instituto de Teatro de la Universidad de Chile.

La vinculación de Neruda con la política tuvo su punto culminante en el año 1970, cuando el Partido Comunista lo designó candidato a la presidencia de Chile, pero el poeta no dudó en renunciar para dar todo su apoyo a Salvador Allende, a quien secundó decididamente en su campaña electoral. Llegado al poder el gobierno de Unidad Popular en 1970, recibió el nombramiento de embajador en París.

   
Neruda con Salvador Allende y su
biógrafo, Volodia Teitelboim
En 1971, Pablo Neruda se convirtió en el tercer escritor latinoamericano y en el segundo chileno que obtenía el Premio Nobel de Literatura, pero su encumbramiento literario no le impidió continuar activamente en la defensa de los intereses chilenos. En Nueva York, aprovechando la reunión del Pen Club, denunció el bloqueo estadounidense contra Chile. Tras renunciar a su cargo de embajador en Francia, regresó a Santiago, donde fue pública y multitudinariamente homenajeado en el Estadio Nacional.

En la cúspide de la fama y del reconocimiento también lo esperaban horas amargas. En 1973, el 11 de septiembre, fue sorprendido por el golpe militar contra el presidente Salvador Allende. Profundamente afectado por la nueva situación, no pudo resistir la tragedia y el 23 de septiembre murió en Santiago. El mundo no tardó en enterarse, entre la indignación, el estupor y la impotencia, de que sus casas de Valparaíso y de Santiago habían sido brutalmente saqueadas y destruidas. Sus funerales se desarrollaron en medio de una gran tensión política. Tras su muerte vieron la luz los poemarios que había escrito antes de morir: Jardín de invierno, 2000, El corazón amarillo, Libro de las preguntas, Elegía y Defectos escogidos, todas ellos editadas por Losada en Buenos Aires en 1974. En Barcelona apareció su última obra, la autobiografía Confieso que he vivido.

Premio Nobel de Literatura

Neruda tras recibir elPremio Nobel de Literatura en 1971.

El 21 de octubre de 1971 le es concedido el Premio Nobel de Literatura y viaja a Estocolmo a recibirlo el 10 de diciembre. En sus Memorias el poeta recuerda: “El anciano monarca nos daba la mano a cada uno; nos entregaba el diploma, la medalla y el cheque (...) Se dice (o se lo dijeron a Matilde para impresionarla) que el rey estuvo más tiempo conmigo que con los otros laureados, que me apretó la mano con evidente simpatía. Tal vez haya sido una reminiscencia de la antigua gentileza palaciega hacia los juglares”.

Muerte

Féretro de Pablo Neruda.

Su última aparición en público fue el 5 de diciembre de 1972, donde el pueblo chileno realizó un homenaje al poeta en el Estadio Nacional.

En febrero de 1973, por razones de salud, renuncia a su cargo de embajador en Francia.

Después del golpe militar del 11 de septiembre su salud se agrava y el 19 es trasladado de urgencia desde su casa de Isla Negra a Santiago, donde muere debido a un cáncer de próstata el 23 a las 22.30 en la Clínica Santa María. Un reciente artículo15 recoge declaraciones de Manuel Araya Osorio, asistente del poeta desde noviembre de 1972 hasta su muerte, quien asegura que Neruda habría sido asesinado en la clínica tras aplicársele una inyección letal. Aunque la información fue desmentida por la Fundación Pablo Neruda,16 el Partido Comunista solicitó, el 6 de diciembre, la exhumación de los restos del Nobel de Literatura, para verificar si fue envenenado.

La casa de Neruda en Santiago fue saqueada después del golpe encabezado por el general Augusto Pinochet y sus libros, incendiados. El funeral del poeta fue realizado en el Cementerio General y, aunque los asistentes estaban rodeados de soldados armados de ametralladoras, se escuchaban desafiantes gritos de homenaje a él y a Salvador Allende, junto a la entonación de La Internacional.

El 11 de diciembre de 1992, los restos de Neruda y Matilde Urrutia son exhumados y llevados para un velatorio ceremonial en el Salón de Honor del ex Congreso Nacional. Al día siguiente se da cumplimiento al deseo del poeta: que sus restos fuesen enterrados en su casa de Isla Negra. Ese lugar y todas las demás pertenencias son ahora museos administrados por la Fundación Neruda.

   Las mujeres de Pablo Neruda     

Publicadas en vida


  • Crepuscular. Santiago, Ediciones Claridad, 1923.
  • Veinte poemas de amor y una canción desesperada. Santiago, Editorial Nascimento, 1924.
  • Tentativa del hombre infinito. Santiago, Editorial Nascimento, 1926.
  • Anillos. Santiago, Editorial Nascimento, 1926. (Prosa poética de Pablo Neruda y Tomás Lago.)
  • El hondero entusiasta. Santiago, Empresa Letras, 1933.
  • El habitante y su esperanza. Novela. Santiago, Editorial Nascimento, 1926.
  • Residencia en la tierra (1925–1931). Madrid, Ediciones del Árbol, 1935.
  • España en el corazón. Himno a las glorias del pueblo en la guerra: (1936–1937). Santiago, Ediciones Ercilla, 1937.
  • Nuevo canto de amor a Stalingrado. México, 1943.
  • Tercera residencia (1935–1945). Buenos Aires, Losada, 1947.
  • Canto general. México, Talleres Gráficos de la Nación, 1950.
  • Los versos del capitán. Imprenta L'Arte Tipografica, Napoli, 1952, 184 pp.
  • Todo el amor. Santiago, Editorial Nascimento, 1953.
  • Las uvas y el viento. Santiago, Editorial Nascimento, 1954.
  • Odas elementales. Buenos Aires, Editorial Losada, 1954.
  • Nuevas odas elementales. Buenos Aires, Editorial Losada, 1955.
  • Tercer libro de las odas. Buenos Aires, Losada, 1957.
  • Estravagario. Buenos Aires, Editorial Losada, 1958.
  • Navegaciones y regresos Buenos Aires, Editorial Losada, 1959.
  • Cien sonetos de amor. Santiago, Editorial Universitaria, 1959.
  • Canción de gesta. La Habana, Imprenta Nacional de Cuba, 1960.
  • Poesías: Las piedras de Chile. Buenos Aires, Editorial Losada, 1960.Las Piedras de Pablo Neruda
  • Cantos ceremoniales. Buenos Aires, Losada, 1961.
  • Memorial de Isla Negra. Buenos Aires, Losada, 1964. 5 volúmenes.
  • Arte de pájaros. Santiago, Ediciones Sociedad de Amigos del Arte Contemporáneo, 1966.
  • Fulgor y muerte de Joaquín Murieta. Santiago, Zig-Zag, 1967. La obra fue escrita con la intención de servir de libreto para una ópera de Sergio Ortega.
  • La Barcarola. Buenos Aires, Losada, 1967.
  • Las manos del día. Buenos Aires, Losada, 1968.
  • Comiendo en Hungría. Editorial Lumen, Barcelona, 1969. (En co-autoría con Miguel Ángel Asturias)
  • Fin del mundo. Santiago, Edición de la Sociedad de Arte Contemporáneo, 1969. Con Ilustraciones de Mario Carreño, Nemesio Antúnez, Pedro Millar, María Martner, Julio Escámez y Oswaldo Guayasamín.
  • Aún. Editorial Nascimento, Santiago, 1969.
  • Maremoto. Santiago, Sociedad de Arte Contemporáneo, 1970. Con Xilografías a color de Carin Oldfelt Hjertonsson.
  • La espada encendida. Buenos Aires, Losada, 1970.
  • Las piedras del cielo. Editorial Losada, Buenos Aires, 1970.
  • Discurso de Estocolmo. Alpignano, Italia, A. Tallone, 1972.
  • Geografía infructuosa Buenos Aires, Editorial Losada, 1972.
  • La rosa separada. Éditions du Dragon, Paris, 1972 con grabados de Enrique Zañartu.
  • Incitación al Nixonicidio y alabanza de la revolución chilena. Santiago, Empresa Editora Nacional Quimantú, Santiago, 1973.
  • Geografía de Pablo Neruda. Editorial Aymá, Barcelona, 1973. Glosas autógrafas de Neruda, Fotos de Sara Facio y Alicia D'Amico.
  • Himno y regreso
  • Que despierte el leñador
  • Tentativa del hombre infinito

Discografía


  • Arte de pájaros (1966, con Ángel Parra)


Publicación póstuma


  • El mar y las campanas. Editorial Losada, Buenos Aires, 1973
  • 2000. Editorial Losada, Buenos Aires, 1974
  • Elegía. Editorial Losada, Buenos Aires, 1974.
  • El corazón amarillo. Editorial Losada, Buenos Aires, 1974
  • Jardín de invierno. Editorial Losada, Buenos Aires, 1974.
  • Confieso que he vivido. Memorias. Barcelona, Seix Barral, 1974. (autobiografía)
  • Libro de las preguntas. Editorial Losada, Buenos Aires, 1974.
  • Cartas de amor de Pablo Neruda. Ediciones Rodas, Madrid, 1975.
  • Para nacer he nacido. Editorial Seix Barral, Barcelona, 1978.
  • Cartas a Laura. Centro Iberoamericano de Cooperación, Madrid, 1978.
  • Poesías escogidas. Biblioteca Premios Nobel. Aguilar S.A. de ediciones, 1980.
  • El río invisible Editorial Seix Barral, Barcelona, 1980.
  • Neruda/Eandi, Correspondencia durante Residencia en la tierra. Editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1980.
  • El fin del viaje. Editorial Seix Barral, Barcelona, 1982.
  • Antología fundamental, prólogo de Jaime Quezada y selección de Jorge Baroos, Andrés Bello, 1997
  • Pablo Neruda, Discursos Parlamentarios. (1945-1948). Editorial Antártica, Santiago, 1997.
  • Pablo Neruda, Cuadernos de Temuco Seix Barral, Buenos Aires.
  • Pablo Neruda, Prólogos. Editorial Sudamericana, Santiago, 2000.
  • Pablo Neruda, Epistolario viajero. (1927-1973), Editorial RIL, Santiago, 2004.
  • Pablo Neruda en O’Cruzeiro Internacional. Editorial Puerto de Palos, Santiago, 2004.
  • Pablo Neruda. Yo respondo con mi obra: Conferencias, Discursos, Cartas, Declaraciones. (1932 - 1959). Ediciones Universidad de Salamanca, Salamanca, España, 2004.
  • David Bautista. Yo respondo con mi obra: tus ojos, Discursos, Cartas, Declaraciones. (1932 - 1959). Ediciones Universidad de Salamanca, Salamanca, España, 2004.
  • Pablo Neruda, J.M. Coetzee, W. Faulkner, Doris Lessing, G.G. Márquez, Discursos, Alpha Decay, Barcelona, 2008.
  • Antología General, Real Academia Española, Asociación Chilena del Libro y Hernán Loyola, Alfaguara, Santiago de Chile, 2010.
Tributos


  • 1965 - Jorge González Camarena - Una sección de sus versos se encuentra en el mural Presencia de América Latina, los que pertenecen al poema América, del libro Canción de fiesta.
  • 1986 - Alberto Cortez - Perdí tu dirección, canción homenaje del disco Sueños y Quimeras.
  • 2011 - Rayden - Si vas, canción homenaje.

Álbumes
  • 1969 - Istros (Danai canta a Neruda) (por Danai Stratigopoulou)
  • 1977 - Paco Ibáñez canta a Pablo Neruda
  • 1999 - Marinero en Tierra. Tributo a Pablo Neruda (disco doble, varios artistas)
  • 2004 - Neruda en el corazón (CD y DVD, varios artistas)
  • 2004 - Sólo el amor (por Ángel Parra)

Artes escénicas

Pablo Neruda fue personificado por Roberto Parada, en la película Ardiente paciencia, ficción creada por Antonio Skármeta (1983), obra que nos propone la relación entre el poeta y su cartero en sus últimos años de vida (1969-1973). En la adaptación al teatro fue representado por Julio Jung, en la versión italiana El cartero de Neruda 1994, fue personificado por el actor francés Philippe Noiret, y en la ópera Il postino (estrenada en Los Ángeles, California el año 2010), fue representado por Plácido Domingo.

En la miniserie de TVN De Neftalí a Pablo (2004), el universitario Neruda fue interpretado por el actor chileno Juan Pablo Ogalde, el niño Neruda por Diego Gamboa, el adolescente Neruda por Danny Foix, y el Neruda joven por Diego Ruiz.

En la película documental Neruda, diario de un fugitivo (2005), de Manuel Basoalto, obra que trata de la fuga del poeta en 1948 y de la persecución a los comunistas decretada por el gobierno de Gabriel González Videla, el papel de Neruda es interpretado por José Secall.


Otros

Tanto en Temuco como en Santiago existen Establecimientos de Enseñanza Superior que llevan su nombre.

En el año 2004 la ex casa de máquinas (maestranza ferroviaria) de Temuco es transformada en museo, llamándose actualmente Museo Nacional Ferroviario Pablo Neruda, en honor a la afición que siempre mostró por el mundo ferroviario, la herencia de su padre.












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